Ayer viendo el blog de Álvaro me paré un segundo a releer su post sobre Yurena y no pude evitar q se me encogiera el alma. Recordar la dureza de los días posteriores a su marcha todavía se me hace muy cuesta arriba. para muchos de los que allí estábamos fue con diferencia el trago más amargo al que nos habíamos enfrentado. Perder un ser querido siempre es muy doloroso, pero quizás en este caso mucho más, perder a una amiga así, ver el sufrimiento de su familia, ver el inmenso dolor de la gente con la que casi has crecido y ver a un amigo enfrentarse a la muerte de su novia es algo para lo que muchos no estábamos preparados. Casi cuatro meses después de la tragedia no puedo evitar sentir cierta emoción al recordar la cantidad de gente que se acercó a velarla. En momentos de tanto dolor, las fuerzas nos flaqueaban cuando iban llegando amigos al tanatorio, cada uno que llegaba era un recuerdo más al que enfrentarnos, reprimir las lágrimas era imposible. Fueron días muy duros, quizás los más duros. Hoy viendo el blog de Álvaro me he decidido a recuperar un post que escribí los días posteriores a su marcha. Tal vez no sirva de nada, pero este es mi pequeño homenaje a una de las niñas más maravillosas que he conocido.
"Cuando era solo un niño, solía proclamar mi ateísmo a los cuatro vientos. Algunos creyentes me decían entonces, q creer, en que hay algo más allá de la muerte, reconfortaba y hacía afrontarla con menos miedo, q era un consuelo pensar q cuando uno muere hay algo más... yo no les creí y sigo sin creerles.
Lo q nadie me explicó entonces, es que el miedo a la muerte propia es insignificante en comparación al dolor q produce saber q no voy a volver a verte. Hoy me gustaría creer en algo y pensar q algún día, en algún lugar, volveré a hablar contigo, volveremos a irnos de marcha o de viaje, volveremos a encontrarnos en un asadero, volveré a verte besar a Álvaro o q volverás a llamarme ¡Demonio! con una sonrisa preciosa cada vez q te gaste una broma. Pero Yure no creo. Y solo me queda el dolor de saber q eso no va a pasar, la impotencia de no poder hacer nada para remediarlo y la sensación de no haberme podido despedir en condiciones.
Hoy me quedo con todos esos recuerdos, con tu sonrisa, con tu alegría... pero siento q sin ti, siempre nos faltará algo.
Hasta siempre Yurena, hasta siempre Demonio..."
4 comentarios:
Hola David. Muchas gracias por el artículo que has escrito a mi hija Yurena. No te conozco, pero saber como querías a mi niña ya me hace quererte.Hoy hace cuatro meses que nos dejó con el corazón roto y el alma encadenada.Muchos besos míos y de "Demonio"
Hola Angela. La verdad es que no esperaba que lo leyera nadie de su familia, así que si le he hecho recodar malos momentos, le pido disculpas. También enviarle un abrazo fuerte a usted y toda su familia. Tienen que seguir adelante, que seguro es lo que ella querría. Lo dicho un abrazo muy fuerte
Dios santo... Soy , bueno, no soy NADIE para ustedes.. en realidad no sé ni cómo por tremendísima casualidad he acabado en vuestras páginas de recuerdos hacia esta chica, Yurena... Pero sin casi darme cuenta he comenzado a entrelazarme en cada palabra acabando por leer algunas cosas que le han ido dejando escritas a esta, sin duda, magnífica chica. Pido disculpas, quizá, por tal osadía... Sólo quería aportar mi insignificante granito de arena para hacer alusión a este precioso detalle que amigos y familiares tienen con ella.. escribir sus memorias en un Blog.. no sé, es precioso. He llorado como una tonta.. lo puedo bien jurar, y sin conocerla me ha llegado al alma todo con especial facilidad; de verdad.. Siento mucho lo que le pudiera pasar a esta chica para dejarles así, tan "pronto".. Perder a alguien siempre es duro... y casi sientes que injusto... pero a mí sí me gustaría poder creer que algún día todos ustedes podrán volver a verla... sino, qué sentido tiene todo sto?!! Ojalá así sea... y si no... bueno, soñar no hace daño a nadie. Ojalá pronto encuentren esa paz interior que cuando un ser querido que nos abandona nos arrebata con fuerza y desolación... Ojalá pudiera no estar escribiéndoles esto.. Les hago llegar un fortísimo abrazo desde alguna parte de Barcelona... y todo mi pésame. Sigan adelante... es lo mejor y casi único que queda.. VIVIR, POR ELLA. Un abrazo con muuuuchos ánimos!
¡Qué orgullosa se tuvo que sentir tu niña ayer de tí! Ayer ,por momentos,vi a la Ángela que todos recordamos,esa Ángela de la que su niña se siente orgullosa y sí,digo se SIENTE porque soy de las que me niego a pensar que se van y ya no están. Mi padre me solía decir que deberían haberme bautizado Tomasita`porque me negaba a creer en lo que no podía ver.Nunca jamás podré decir que mi dolor es mayor que el tuyo pero cuando mi padre se fue,me sentí sola,rodeada de gente, pero sola.Miraba al cielo y preguntaba ¿Por qué? ,¿Qué te hizo ?, ¿Qué te he hecho?,¿Por qué a él? ,llegué incluso a ofrecer la mitad de lo que me quedara de vida por estar sólo 5 minutos con él, En las noches,recordaba cada minuto que habíamos compartido en esos días y me sentaba en la cama esperando en vano, que llegara y se sentara a mi lado para abrazarme como lo hacía siempre.Duermo cada noche y vivo cada día con su medalla y es mi gran tesoro.Cuando lo necesito sé que está ahí y si me quieren llamar loca pues que lo hagan,pero sé que está ahí.Físicamente no podemos tocar sus manos siquiera,pero están en cada centímetro de nuestra piel.Mi gran amigo se marchó y no sé por qué decidió no llevarme con él como otras tantas veces pero ¿sabes Ángela? cuando tenga que hacer el mismo viaje sé que va a ser ÉL el que venga a buscarme. Yurena y papá están en el mundo de la buena gente , en ese mundo al que sólo se accede de forma natural y sin equipaje.
Pienso seguir haciendo las cosas para que cada día se pueda sentir orgulloso y me mire desde allí con una sonrisa de satisfacción.
Yurena tiene que sentirse sumamente orgullosa de su madre y no dejo de repetir que esas fuerzas que sacaste ayer para enfrentar al inspector,te las dio ella.No me pregustes el por qué, pero sé que estaba allí contigo.
Nadie entiende el por qué yo hablo en presente de papá,o como en tu caso de Yurena,pero me niego a decir esas palabras que todos usan.Realmente nos destrozaron el corazón con sus respectivas partidas y algo que se rompe, no se reconstruye y queda de la misma manera,
Yurena y papá *morirán* el día que nos olvidemos de ellos o dejemos de hablar de ellos.Yo no lo haré y tú sé que no lo harás tampoco.
Publicar un comentario